sábado, 3 de marzo de 2018

El pensamiento en La Edad Moderna y Contemporánea. Su contexto histórico y cultural c) El positivismo. Sus representantes


El pensamiento en La Edad Moderna y Contemporánea. Su contexto histórico y cultural
c) El positivismo. Sus representantes
Se empleó por primera vez “positivismo” para definir la doctrina de Comte, según la cual la forma de conocimiento suprema es una simple descripción de los fenómenos considerados como sensibles. La doctrina se basa en la “ley de los tres estadios” que Comte creyó descubrir en 1822, pero que ya había sido anticipada por Turgot en 1750.
Los tres estadios son:
-        El teleológico: en el cual se utilizaban decisiones antropológicas para explicar los acontecimientos naturales.
-        El metafísico: en el cual estas decisiones se despersonalizan para convertirse en fuerzas y esencias.
-        El positivo
Debe notarse que se suponía que la descripción positivista se presentaba en fórmulas matemáticas, no en psicología introspectiva.
“Las corrientes positivistas representadas en el siglo XIX por Comte y Stuart Mill, adoptan una actitud que se limita exclusivamente al conocimiento de los hechos de la experiencia ateniéndose únicamente a lo dado y reduciendo todo tipo de enunciados a proposiciones empíricas. De acuerdo con ello el conocimiento queda limitado a los fenómenos y a sus relaciones y toda creencia de algo verdadero subyacente tras los mismos fenómenos es rechazada. Es más si hubiera algo más allá de la experiencia ese algo no podría ser ni enunciado ni pensado ni preguntado.
Sus representantes
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Augusto Comte (1798-1857)

Nacido en Montpellier (Francia), su formación fue cediendo paso a la incredulidad (…) Fue grande la influencia que en él ejerció el filosofo socialista Saint Simón.
Tenía el propósito de renovar la humanidad sobre la base del Positivismo social, científico y religioso.
En el año 1846 se fundó la Sociedad Positivista, y Comte fue nombrado “Pontífice Supremo de la religión de la humanidad”.
El principio fundamental de la doctrina compteana es el siguiente:
“el único objeto de la ciencia es lo positivo”, por esta razón la humanidad -superada ya las etapas teológicas y metafísicas-, deben alcanzar su perfección en la Etapa Positiva; en lo que solo se valora lo útil, lo orgánico, el dato experimental. El dogma fundamental de la religión positivista es: “el amor como principio, el orden como base, el progreso como fin”.
Augusto Comte nació y vivió en un período en el que las condiciones sociales y políticas de Francia eran muy inestables. Se enfrentó reflejando el espíritu de su época con la tendencia de sus predecesores a anteponer las doctrinas filosóficas al estudio de los hechos de la naturaleza y la sociedad. Su crítica fue dirigida especialmente contra la metafísica tradicional y sus interminables especulaciones, sus suposiciones in-fundamentadas y sus fútiles controversias. El mismo dio a su filosofía el nombre de positivismo.
La historia de la humanidad podría ser resumida en tres estadios:
-El primer estadio era el estadio teológico, en el que la interpretación de la realidad estaba dominada por suposiciones y prejuicios.
-El segundo estadio era el estadio metafísico, en el que se intentaba comprender y razonar sobre la realidad pero se era incapaz de apoyar los argumentos en hechos.
-El tercer estadio era el estadio positivo, en el que las creencias dogmáticas empezaban a ser substituidas por el conocimiento de los hechos.
La historia del pensamiento se caracterizaba por una cierta sucesión de ciencias que expresaban el retorno del interés científico hacia los asuntos terrenales y humanos, como la astronomía, la matemática, la física, la química, la biología y la sociología.
Comte: creador del Positivismo
-        Convirtió al Positivismo en una religión de la humanidad
-        Criticó la metafísica tradicional y sus especulaciones
Comte puede considerarse el primer filósofo que tuvo conciencia de la posibilidad de la sociología como ciencia, enunció con optimismo la primera gran “ley general” conocida como “ley de los tres estadios” que sería la ley del progreso humano.
Distinguió la estática social o teoría general del orden espontáneo de las sociedades humanas y la dinámica social o teoría general del progreso natural de la humanidad.
El orden social es lo que podríamos llamar su estructura, el progreso, su desenvolvimiento. De este progreso creyó encontrar Comte la ley general en los tres estadios.
Tres estadios:
1.     Teológico-militar
2.     Metafísico-crítico
3.     Positivo-industrial: éste último estudio que Comte anunciaba para el futuro, tenía en él mismo su teorizador y profeta. Describía ese “estadio positivo” como el reino de la más generosa solidaridad entre los hombres, de la más armoniosa unión entre las ciencias, de la más perfecta armonía entre la actitud teórica y la capacidad práctica. El hombre jefe de la jerarquía de los seres vivientes consolidaría su moral y desarrollara todas sus posibilidades como ente social libre ya de las trabas de la imaginación teológica y de la metafísica individualista y egoísta. El hombre habría cedido el paso a la humanidad.





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